Vas en el bondi, en un viaje común y corriente, cuando de repente Dios manda un rayo de buenaventura y... ¡hurra! ¡se rompe la máquina expendedora de boletos! A partir de ahí, el chofer y los afortunados pasajeros emprenden una vertiginosa carrera por las calles de la ciudad, sin parar en ninguna parada y observando con secreto placer a los pobres seres allí afuera que, moviendo sus bracitos incesantemente, intentan en vano detener al intrépido colectivo y, al ver que no les para, ponen esa genial cara de indignación al mismo tiempo que asienten con la cabeza y ponen los brazos en jarra.
miércoles, 6 de agosto de 2008
Gira mágica y misteriosa
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6 comentarios:
jajajajja siiiii.
te sentis como si hubieras sacado la llave de feliz domingo del viaje a bariloche.
pero sin soldan
ni su peluca.
es de esas cosas q te haecn viajar mas feli, sobretodo cuando vovles con suenio y el colectivo explota d gente...
pero es horrrrrible cuando te toca estar abajo y q el colectivo siga d largo
=S
a mí también me gusta the who, aguante (por las etiquetas te digo...).
nunca me pasó que el cole siga de lrgo porque se rompió la maquinita...sigue subiendo gente, como si nada... será cosa de bonaerenses eso de seguir...?
nu se.
besos
luu
WWWW.FOTOLOG.COM/LULI_BARILOCHE
AJAJAJAJAJAJA SIIIIIII! es como cuando agarrás la estrellita en el mario bros :D se siente igual de mágico!
Qué gráfico sos, es sorprendete sabiendo de tu serio problema (?)
Vos tomás muchos colectivos.
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